Hoy 25 de abril por primera vez en este año de pandemia, pierdo a un miembro de mi familia, una de mis primas fue víctima del asqueroso Covid, que sigue y sigue matando personas; su contagio no fue por imprudencia solo se dió (hay miles de casos así).
No la veía desde hace algunos años, pues ella y otras primas por parte de madre viven en Machala, pero hoy que se puso sus alas y sólo recordé la última vez que la vi.
Aunque jamás se lo dije, la admiraba millón porque el cáncer le arrebató a su primer hijo pero siguió adelante con ese dolor y cuando yo pasé por algo similar solo me envió un mensaje que decía Él ahora está feliz y mejor. Palabras llenas de razón y cariño.
Hoy no está y a los que quedamos sólo nos toca seguir cuidándonos de este virus de mierda que no sabe cómo te puede atacar, con unos tiene "piedad" pero con otros no.
Aprovecho este post (me desahogo escribiendo) para agregar un texto que mi hermana sin querer encontró pero que está lleno de verdad...
Por favor, cuando salgan piensen que el maldito virus puede ser benevolente o cruel pero eso no lo sabes... Usen máscarilla y full alcohol.
*CUANDO UN ALMA DEJA SU CUERPO*
Cuando un alma deja su cuerpo biológico, sobreviene una expansión de consciencia, una sensación de inmensa paz y liberación.
Las almas nunca parten solas, nadie muere solo, por lo general son acompañados por familiares que partieron antes y que vienen a acompañarles. Tambien guías espirituales se hacen presentes para tranquilizarles y acompañarles en su trayecto.
Algunas veces son llevados a lugares de recuperación, sobretodo si se pasó por una muerte inmediata o por una larga y desgastante enfermedad. O si se tuvo una vida difícil.
La persona que abandona su cuerpo recibe y percibe con agrado nuestros pensamientos de agradecimiento por su vida.
Siempre podemos ayudarles con nuestras palabras y pensamientos tranquilizadores para evitar su preocupación o apego a este plano.
El alma se despide una vez que siente y percibe que sus familiares están más tranquilos. Por lo general se hacen presentes en su cuerpo de energía a través de los sueños.
Lo que más necesita una persona al abandonar su base fisiológica es sentirnos y sabernos que vamos a estar bien.
El más grande regalo que podemos ofrecer a una persona cuando abandona su cuerpo es nuestra propia Paz y Energía Amorosa.
En honor para todas las almas que están experimentando su tránsito o transición.